Todo gira en torno a la capacidad. Cuando se diseña un parque acuático, no conviene proyectarlo para un público excesivo, pues, de lo contrario, estará vacío la mitad del tiempo. De la misma manera, tampoco conviene proyectarlo para pocas personas, porque tendría un efecto disuasorio en los visitantes (y, por consiguiente, consecuencias negativas en términos de ingresos). ¿Dónde se sitúa la media feliz?
En lo que conocemos como el «día de diseño», que se establece aplicando las fórmulas siguientes:
Visitantes en el mes de máxima asistencia x 22,7% = Semana de máxima asistencia
Analizar el número de visitantes anuales y la distribución por estaciones nos permite determinar el mes de máxima asistencia.
Semana de máxima asistencia x 50%/2 = Día de máxima asistencia
En la mayoría de los mercados, el 50% de los visitantes acuden entre semana y el otro 50% durante el fin de semana.
Día de máxima asistencia x 75% – 80% = Día de diseño
Reduce el número de días de máxima asistencia a una cifra que te resulte cómoda y encaje con tu plan de empresa.
El resultado es un parque diseñado para funcionar bien los días de mayor asistencia del año y que resulte cómodo la mayoría de los días «normales».
Y eso tiene repercusiones positivas en el negocio.